Como Sol, Como Mar
Tu eres el sol,
Tu eres el mar,
y en mi corazón,
no abunda el mal.
Tu belleza se pierde
en el borde de mi mirada
y tu voz ferviente,
como el canto de un hada.
Tu carisma siempre acogedora
en las heladas tardes de mi alma
ansiosamente esperaba la hora
en la que tú fueras mi amada.
Tu cara siempre angelical
tu rostro como sol
tu ojos como mar
me dan razones para amar.
Raymundo Rodríguez,
Enero 2010
Bueno amigos ese fue el poema espero les guste.
jueves, 28 de enero de 2010
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